Consejos para ahorrar energía con el uso del aire acondicionado para cuidar del planeta
- El uso de aire acondicionado parece imprescindible en lugares tan cálidos como Quinana Roo. Sin embargo, abusar de este recurso es un peligro para nuestros bosillos y para nuestro planeta. Por ello, hoy te damos una serie de recomendaciones para ahorrar energía aún si utilizas uno de estos sistemas en tu hogar:
Sin lugar a dudas, las altas temperaturas de Quintana Roo ponen a prueba los sistemas de aire acondicionado en muchos hogares y negocios. Sin embargo, más allá de las altas facturas energéticas que dichas estructuras llegan a causar, su uso excesivo también contribuye a la emisión de gases de efecto invernadero, los cuales representan uno de los principales factores para acrecentar la problemática del calentamiento global. En razón de ello, te traemos algunos consejos prácticos para mantenerte fresco y amigable con el medio ambiente:
5 consejos para ahorrar energía (y dinero) si utilizas aire acondicionado en tu hogar
Mantén una temperatura razonable
En tu sistema de aire acondicionado, asegúrate de configura el termostato a una temperatura eficiente, pero cómoda. En general, se recomienda establecerla entre los 24 y 26°C en verano. Se estima que cada grado por encima de esta temperatura puede ahorrar hasta un 10% en consumo.
Usa ventiladores convencionales como ‘relevo’
Combina el uso de tu aire acondicionado con ventiladores tradicionales (ya sean de techo o portátiles) Así, el aire frío se distribuye mejor en el hogar, e incluso, puedes dejar descansar a tu aire acondicionado un rato. Recuerda que sin importar que tan “sofisticado” se vea un ventilador tradicional, nunca consumirá tanta energía como el aire acondicionado.
Otorga un mantenimiento regular a tu aire acondicionado
Los filtros sucios obligan a los componentes del aire acondicionado a trabajar más, y por lo tanto, a consumir más energía eléctrica. Asegúrate de limpiarlos o cambiarlos regularmente (es decir, al menos una vez al mes durante la temporada de uso intensivo.)
Utiliza otros recursos inteligentes de aislamiento
En las temporadas más calurosas, asegúrate de que las ventanas y puertas estén bien selladas para evitar fugas de aire, así como la entrada de intensa luz solar. Está comprobado que un buen aislamiento en paredes y techos ayuda a mantener fresca la temperatura interior sin necesidad sobrecargar el aire acondicionado.
Reduce el calor provocado por otros electrodomésticos
Durante las horas más calurosas del día, evita el uso de electrodomésticos que generen calor: estudfas, hornos, secadoras, etc. En este punto, también es recomendable que, de forma complementaria, te mantengas bien hidratado y evites alimentos que incrementen tu temperatura corporal (así no sentirás que necesitas de un ‘enfriador’ extra)