El excesivo consumo del agua al generar imágenes, como las de Studio Ghibli, con la IA
Generar imágenes con Inteligencia Artificial puede consumir hasta altas cantidades de agua y energía. Descubre el impacto real de la IA en el medioambiente.
La inteligencia artificial ha revolucionado la creación de imágenes, permitiendo a los usuarios generar visuales impresionantes con solo descripciones textuales. Sin embargo, detrás de esta aparente magia se esconde un consumo significativo de recursos, especialmente agua y energía.
Un estudio reciente reveló que generar una sola imagen con IA puede requerir hasta 3.45 litros de agua, principalmente para refrigerar los servidores que procesan estas tareas.
Este consumo se dispara al generar múltiples imágenes, como las populares creaciones al estilo de Studio Ghibli, donde cinco intentos pueden consumir hasta 17 litros de agua.
¿Cuánta agua se gasta realmente al generar imágenes con IA?
Los investigadores han intentado cuantificar el impacto ambiental de la generación de imágenes con IA. Un estudio de la Universidad de California analizó el consumo hídrico del centro de datos de Microsoft en Iowa, donde opera GPT-4. Los resultados revelaron un aumento del 37% en el consumo de agua entre 2021 y 2022, alcanzando los 6.436 millones de litros anuales. Este incremento se atribuye en gran parte al uso intensivo de modelos de IA.
«El consumo de agua en la generación de imágenes con IA es un problema creciente«, advierte Sasha Luccioni, investigadora en Hugging Face. «La falta de transparencia de las empresas tecnológicas dificulta la medición del impacto real, pero las estimaciones son alarmantes«, añade.
El gasto de energía al generar imágenes con IA
Además del agua, la generación de imágenes con IA también implica un gasto energético significativo. Los modelos de imagen son los más demandantes en términos de energía, con un promedio de 2,9 kilovatios hora (kWh) por cada 1000 inferencias de imagen. Esto significa que cada imagen creada con IA consume tanta energía como una carga completa de un teléfono móvil.
Esta demanda energética también se traduce en una mayor necesidad de refrigeración para los centros de datos, lo que a su vez incrementa el consumo de agua.

Fuente: Foto de Sanket Mishra en Pexels.
¿Cómo reducir el impacto ambiental de la IA?
Si bien la IA es una herramienta poderosa, es necesario tomar medidas para mitigar su impacto ambiental. Algunas soluciones incluyen:
- Uso de energías renovables en centros de datos para reducir la huella de carbono.
- Mejor eficiencia en el hardware para disminuir el consumo de energía y agua.
- Políticas de transparencia de las tecnológicas sobre el impacto ambiental de sus modelos de IA.
- Optimización de los algoritmos para que requieran menos procesamiento y, por ende, menos recursos.
La falta de transparencia dificulta la medición precisa del impacto ambiental de la generación de imágenes con IA. Sin embargo, las estimaciones disponibles indican que el consumo de agua y energía es considerable. Es fundamental tomar medidas para mitigar este impacto y promover prácticas más sostenibles en el desarrollo y uso de la IA.