Las enfermedades más comunes que puede evitar o sanar solo tomando agua
- Beber agua en cantidades adecuadas no sólo ayuda a prevenir diversas enfermedades, sino que también es clave para un buen funcionamiento general del organismo. Adicionalmente, la correcta hidratación asegura que el cuerpo elimine toxinas, mantenga el equilibrio de electrolitos, y funcione óptimamente en procesos vitales. Por lo tanto, a veces el sólo hecho de tomar agua contribuye en gran parte al tratamiendo de ciertos padecimientos.
Tal y como aprendemos desde niños, el agua es fundamental para el funcionamiento óptimo del cuerpo, contribuyendo a prevenir o mejorar diversas enfermedades. A continuación, te contamos de algunas enfermedades comunes que se pueden evitar (o aliviar en parte) mediante una ingesta de agua apropiada:
7 Enfermedades que se pueden evitar y/o tratar consumiendo agua
# 1 Deshidratación
La deshidratación en sí misma es una enfermedad. Ocurre cuando el cuerpo pierde más líquidos de los que consume, y puede causar síntomas como dolor de cabeza, fatiga, mareos, y confusión. Así, el hecho de beber suficiente agua es esencial para prevenirla y mantener el equilibrio de los fluidos en el organismo. Ahora bien, si alguien ya está deshidratado, beber agua de forma adecuada es el primer paso para recuperar el equilibrio hídrico.
# 2 Infecciones del tracto urinario (ITU)
Consumir suficiente agua ayuda a diluir la orina y a aumentar la frecuencia de micción, lo cual reduce el riesgo de desarrollar infecciones del tracto urinario gracias a la eliminación contínua de bacterias. Ahora bien, en personas con infecciones leves, aumentar la ingesta de agua puede ayudar a expulsar las bacterias del tracto urinario más rápidamente, evitando la administración primaria de antibióticos (mismos que serán esenciales si la ITU llega a ser demasiado duradera.
# 3 Cálculos renales (piedras en los riñones)
Beber suficiente agua diluye las sustancias en la orina que pueden formar cálculos renales, tales como el calcio y el ácido úrico. Sin embargo, para las personas que ya han formado cálculos renales, beber mucha agua puede ayudar a expulsarlos más fácilmente a través de la orina (suponiendo que no hayan alcanzado un tamaño que se considere riesgoso.)
# 4 Estreñimiento
El agua facilita el tránsito intestinal al mantener el contenido del colon hidratado y ablandar las heces, lo que facilita su evacuación. En personas con frecuentes problemas de estreñimiento, el agua mejora el flujo intestinal, reduciendo la incomodidad y el malestar.
# 5 Fatiga y falta de energía
Las ‘hermanas’ de la deshidratación provocan una disminución del flujo sanguíneo y del oxígeno a los músculos, lo que genera fatiga y cansancio excesivo. Beber agua adecuadamente mejora los niveles de energía.
# 6 Problemas de piel
El agua ayuda a mantener la piel hidratada y a eliminar toxinas del cuerpo. Por ello, una adecuada hidratación puede prevenir la piel seca y ciertos brotes de acné. Si ya existen problemas similares, aumentar la ingesta de agua puede contribuir a una mejora general del estado de la piel.
# 7 Hipertensión
La deshidratación puede hacer que los vasos sanguíneos se contraigan, lo que puede aumentar la presión arterial. En algunos casos, la hipertensión leve puede beneficiarse de una adecuada ingesta de agua, la cual contibuirá a una mejor circulación sanguínea y a un equilibrio de los líquidos en el cuerpo.